El chocolate se descubrió por acá, por nuestras tierras y si bien no somos famosos por procesarlo tenemos los mejores y eso lo saben en todo el mundo, tanto así que tiempo atrás, en Europa solo los nobles podían degustarlo.
Pero el chocolate en nuestros días, además de seguir siendo muy apetecibles por todos, se ha vuelto un afrodisiaco, casi droga, que impulsa y potencia el amor y las buenas relaciones.
El chocolate trabaja en las más altas zonas del placer que son el gusto y el olfato predisponiendo a la personas a experimentar lo placentero, generando en el cuerpo la adquisición de serotonina, neurotransmisor asociado a la emoción y al estado de ánimo.
Las investigaciones han demostrado que cuando hay poca cantidad de serotonina en el organismo se presenta la depresión, que genera problemas como el control de la ira, el desorden compulsivo-obsesivo y el suicidio, así como a un incremento en el apetito y alteraciones del sueño que se asocian a problemas emocionales.
El chocolate es una deliciosa opción para regalar ya que además de ser muy apreciado, pocas cosas sustituyen la sensación de placer y de bienestar que proporciona el llamado por los Olmecas, “Regalo de los Dioses”.
En esta temporada del Día del Amor y la Amistad te invitamos a saborear y regalar nuestros alfajores que, aparte de tener una buena porción de exquisito relleno y una sabrosa galleta, están recubiertos del mejor y más afrodisiaco chocolate que le pudimos poner.
Artículos de Referencia
http://www.terra.com/mujer/articulo/html/hof22493.htm
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